Mi primera comunión

Mi primera comunión

Es un día especial, un día preparado con mimo, con tiempo y lamentablemente, con la incertidumbre de ver las noticias casi cada día (además de la dichosa aplicación de EL TIEMPO). Todas sabemos de qué hablamos.

Desde siempre nos ha gustado ayudaros en cualquier evento, y la comunión sin duda es uno de ellos. Tanto para niña como para niño. Aquí van nuestros 5 CONSEJOS básicos para que ese momento sea absolutamente inolvidable:

  1.        SONRÍE SIEMPRE: es un tópico, pero si ya tienes un peque que hace la comunión, sabes lo que son las fotos de tu primera comunión. Se desprende la tensión de tu madre viendo que tienes una pequeña arruga, tu propia tensión de tu padre que te pide que saludes a la tía abuela,… Es un día para sonreír siempre, si se arruga, que se arrugue, y si se mancha, ¡¡que disfrute!! Y el color de la sonrisa… el verde… Aquí te dejamos algunas ideas. ¡¡Y OJO!! En las fotos sí vale lo de quitarse la mascarilla

 

  1.        ANTES MUERTA QUE SENCILLA… ¡NO! Se llevan los pequeños detalles, se lleva el minimalismo, se lleva el “lo poco gusta”. Toques sutiles de elegancia, pequeños gestos a la familia. El toque siempre lo da un buen complemento, una diadema, unos pendientes sencillos, un detalle en el traje,… Visita nuestra sección de complementos, alguna idea te llevas seguro!!

 

  1.        PIDE FOTOS. Vale que contrates un fotógrafo profesional, nosotras tenemos la nuestra que mejor lo hace (encuéntrala AQUÍ), pero hoy por hoy los móviles hacen unas fotos increíbles. Pídelas. No te cortes, el álbum que te va a salir es alucinante, lleno de detalles y recuerdos, de gente especial, de familia. Y sobre todo, pide ¡¡SELFIES!!!

 

  1.        SEGUNDAS PARTES. Tu hijo/a va a disfrutar, y como buen niño, va a correr, va a saltar, va a jugar, va a sudar,… Y así ha de ser. Así que no te compliques, lleva siempre la segunda muda, elegante, divertida y muy protagonista. Puedes jugar con los hermanos, hasta incluso con detalles de los papis,… siempre diversión. Y el clásico para estos momentos: las lonitas. Cómodas, coloridas, alegres, para esas segundas partes que siempre son buenas.

 

  1.        LOS DETALLITOS. ¿sabes dónde van a acabar, verdad? Pues eso. No gastes mucho en cosas que no dejen huella. Implica al peque, que los diseñe, que participe: desde un marca páginas, una foto con los amiguitos (para regalársela en un marquito bonito), la fotito con las abuelas, hasta un dibujo,… Cosas que dejen huella. Ahh, y un detalle que siempre es bonito recordar: el libro de firmas. Es como una máquina del tiempo,…  ¿sabes cuándo lo volverás a leer? Cuando seas tu la abuela del comuniante, ya verás qué risas.

 

Disfrutad muchísimo del día, es único, es especial. Así que toma estos consejos, o los que tú quieras.

Gracias por confiar en nosotras

Bambolines

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